Tras un merecido descanso,empezamos a levantar el campamento,retomamos lo de bajar en forma separada,como voy solo,la forma de guiarme es las huellas en el camino,en una bifurcación noto extrañado como Alejandro que me precede,sigue derecho empezando a subir una pequeña cuesta,al llegar al lugar,que no ha sido transitado,me devuelvo unos metros,para mi sorpresa encontré una roca con una flecha,que señalaba a la derecha,el sendero si estaba bien trillado,lo que me confirma que es el correcto,ya no puedo avisarle mi compañero,puesto que lo había perdido de vista,espero que también notara su error y se devolviera,este sector es fácil de seguir,al final conduce hasta el ultimo sitio donde pueden llegar las camionetas 4x4.
Allí me reuno con Federico,que es el primero en llegar,después de un tiempo Alejandro apareció en el sendero,le pregunte que le había sucedido,me contestó que al notar también la falta de huellas,optó por regresar encontrando el mismo desvío.
Cuando el cupo de la camioneta esta completo,el conductor decide llevarnos y volver mas tarde por los demás,el clima empeora comenzando a llover de forma copiosa,ahora si el camino se pone resbaloso,vamos muy lento,de pronto nos encontramos con la otra camioneta contratada metida entre la cuneta,tratamos entre todos de sacarla pero es imposible,en u momento se trata con la que nos lleva,con la mala fortuna de caer en la cuneta,ahora si quedamos varados,un carro que baja nos hace el favor de avisar en la entrada de la reserva de nuestra situación,en poco tiempo llega una camioneta con el personal,que en forma rápida y ágil sacan las camionetas.El resto del viaje hasta el hostal, no tiene nada de particular,tal vez lo único es que llegamos mojados lo mismo que todos los morrales.
Empleamos la tarde en tratar de secar todos los equipos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario